Gracias, Señor, por un bendecido 2009 from Fernando Soto-Dupuy on Vimeo.
Sunday, December 27, 2009
Sunday, October 18, 2009
Tres hermosos fines de semana.
Oct. 4, tuvimos nuestra mejor asistencia: 153. Cada semana el grupo de alabanza está haciendo mejor trabajo al llevarnos ante el Señor en adoración. Tuvimos cinco bautismos: Geo (se pronuncia Gío), una niñita de 11 años, la hija menor de una pareja que conocimos hace 8 años. Toda la familia llegó a conocer al Señor gracias al Encuentro Matrimonial en el 2002. Fue emocionante ver a sus padres bautizándola. Leticia, cuyo hijo (guitarrista del grupo de rock Enjambre) se convirtió hace un par de años. Él y yo sepultamos a su madre en el agua. Jorge, un acordionista de vallenato, que llegó al Señor después de muchos fracasos relacionales. Marisela, su novia, de El Salvador, quien después de muchos años de confusión finalmente ha visto la luz. Y finalmente Maribel, cuyo esposo Alec, me ayudó a bautizarla. Estaba ella muy embarazada. Seis días después dio a luz a su tercera hija.
Sunday, September 20, 2009
Sunday, September 06, 2009
Primera celebración Ágape-Anaheim.
Tuesday, August 11, 2009
Comunión Mundial
Thursday, July 16, 2009
16 de julio, cumpleaños de mi hijo.
Cumple 21, ahora es mayor de edad mi hijo Karlo. En este momento se le viene el mundo encima, con su pequeña Rin de cuatro meses en el hospital con un infección a su ojito y esperando que le hagan una pequeña cirugía para abrir el lagrimal tapado. A sus 21 años está listo para llevar a su esposa y a su hija a su nuevo apartamento a fin de mes. Ha sido promovido en su trabajo, está estudiando en el college, está sirviendo al Señor con sus dones de música, está siendo un cristiano comprometido y radical (a veces molesta su franqueza e ideas radicales), pero nos da una alegría profunda verlo así.
A MI HIJO
(Autor: Tito Fernández)
Cada vez que me acuerdo de mi hijo
Me da como una punzada
Aquí adentro del pecho
Donde se halla colocada
Tan sensible, tan nombrada
Y tan propensa a la emoción
Esa masa colorada que se llama corazón.
Y cómo no he de sentirla
Si se trata de mi hijo
El que con sus payasadas
Su chicle, su mermelada
Me dejaba pegajosos
El cubrecama y la almohada
Y aunque a veces me propuse reñirle
Siempre fallaba
Pues el pícaro salía con su sonrisa inocente.
Y al verlo así tan sonriente, bueno, lo perdonaba
Cómo olvidar las mañanas en que mamá lo peinaba
Sentado él en una silla la barbilla levantada
Con un gesto de protesta por la lucha que libraban
La mamá y el remolino aquel que casi siempre ganaba.
Y nunca logré explicarme el motivo por el cual
Lo peinaban tanto y tanto si al cabo quedaba igual.
Pero el tiempo fue pasando
Y hoy mi hijo no es el mismo
Ya no me da los problemas, entretenidos de niño.
Ahora es un caballero, se afeita con mi navaja
Ahora maneja mi auto, y se pone mis corbatas.
Se acabó aquel inocente del susto, el llanto, la tos
Ahora él es el que manda, y hasta sabe más que yo
Incluso sin ir más lejos, ya está casado y con hija.
Yo por dentro los bendigo, por fuera me pongo serio
Porque debo confesar que me da un poco de miedo.
Notar en aquellos jóvenes, como se ha pasado el tiempo.
Si hasta parece que les falta ese poco de mermelada
Y todo está en su sitio, no hay nada en que tropezarse
No hay nadie quien quiebre un vidrio
Ni haga a la mamá enojarse
Y los platos no se rompen
Y el canario no se sale.
¡Como hace falta mi hijo en esta casa tan grande!
(*La foto de arriba, yo, a la izquierda y Karlo a la derecha a la misma edad, 4 años, en el mismo lugar: el patio de la casa de mi bisabuela Carmen Cid).
Wednesday, July 01, 2009
Billy Mays y el pan nuestro de cada día.
Creo que ya he encontrado la introducción para mi quinto sermón en la serie Una nueva manera de rezar el Padre Nuestro, “Danos hoy nuestro pan de cada día”:
En nuestro vuelo de Los Ángeles a San Antonio leí el siguiente artículo de la revista de American Airlines titulado Million Dollar Bill (Bill, en inglés, es billete, pero a la vez es el diminutivo de Guillermo) Billy Mays, el extraordinario gurú de las ventas por televisión ha amasado una fortuna como el rostro de los comerciales de limpiadores hogareños y artículos de cocina. Al final del artículo nos dicen que la última aventura de Billy Mays es la venta de Seguro de Salud. Déjenme citar lo que dice la revista: “Fue un gran salto cruzar de la venta de rebanadores y productos de cocina a ganar la confianza de la gente con su salud… No creo que OxiClean (limpiador de alfombras) haya salvado jamás una vida. Quizás ha sacado de apuros a alguien que tenía una mancha en la alfombra, pero no le ha salvado la vida… Tengo mucho que dar y mucho que hacer todavía con mi vida. Creo que hay una plataforma más grande aún ahora para mi”.
Leí el artículo el viernes. El domingo, en la iglesia, el predicador nos dijo que esa mañana Bill Mays había fallecido. La autopsia mostró un ataque al corazón. Sus arterias estaban en pésimas condiciones. ¡Cuán irónico! Estaba ganando millones en la venta de seguros de salud y murió joven por causa de su mala salud.
“Danos hoy nuestro pan de cada día” es una oración peligrosa de orar en estos tiempos de dieta diaria híper-calórica. Billy Mays es un ejemplo de lo mal que tratamos a nuestros cuerpos, templos del Espíritu Santo. Así que en mi sermón mencionaré cuatro “ingredientes” que arruinan nuestros cuerpos: la comida, el alcohol, las drogas y el fumar (tabaco y marihuana).
Envíenme sus ideas y testimonios.
Monday, June 29, 2009
Monday, June 22, 2009
Saturday, May 30, 2009
Una nueva manera de rezar el Padre Nuestro.
La nueva manera de rezar el Padre Nuestro es usando las diferentes partes del cuerpo.
Tuesday, April 21, 2009
¿Cristianismo anglo-hispano?
A veces el cerebro se me acelera. Me pasó esta mañana mientras Rachel Oblon dirigía el devocional en la reunión de personal de Parkcrest. Hablaba ella de Hechos cap. 11. Difícilmente le puse atención mientras mi mente hacía una “exégesis de alta velocidad”.
25 Después partió Bernabé para Tarso en busca de Saulo,26 y cuando lo encontró, lo llevó a Antioquía. Durante todo un año se reunieron los dos con la iglesia y enseñaron a mucha gente. Fue en Antioquía donde a los discípulos se les llamó «cristianos» por primera vez.
Bernabé era un judío nacido en Chipre, Tarso era una ciudad en lo que hoy es Turquía, Saulo (nombre hebreo) llamado más tarde Pablo (nombre latino), fue llevado a Antioquía (ciudad fundada en honor de un general griego). La iglesia allí no era judía, pero tampoco era totalmente gentil. Fue allí que el nombre de CRISTIANO fue usado por primera vez.
¿Puedes notar el alcance cros-cultural en donde lo chipriota, turco, griego, hebreo y latín se entrelazan en dos versículos?
Estamos ministrando en Los Ángeles en forma cros-cultural. Creemos que la iglesia debe cruzar barreras culturales. Hace un par de meses me di cuenta que la Iglesia Ágape es una iglesia multi-cultural. Dentro de nuestra comunidad de fe tenemos gente anglosajona-blanca, un negro africano, una madre soltera china, argentinos-europeos, ecuatorianos-quechuas, centro y sudamericanos, y portorriqueños caribeños. Es sorprendente notar los diferentes acentos del castellano, ver las diferentes costumbres culturales y comer la variedad de platillos. Añádale al cuadro, un inglés con acento británico del keniano y los buenos modales de la chinita. Así es que no nos llamen una iglesia mono-étnica porque usamos el español como idioma primario. De hecho tenemos traducción simultánea al inglés y estamos seriamente pensando en comenzar un segundo culto en ese idioma. Somos una comunidad de fe multi-étnica.
No conozco muchas iglesias inglesas que posean esta “cros-culturidad”. El equivalente sería una iglesia que adore en inglés y tenga miembros de Inglaterra, Escocia, Irlanda, personas del África británica, canadienses, jamaicanos, belicences, australianos, hawaianos, malvinenses, etc.
La iglesia de Antioquía era una iglesia multi-cultural. De hecho, el nombre “cristiano” es una mezcla del griego y del latín: Christos (es la traducción del hebreo “Mesías” al griego) y IANVS (un sufijo del latín).
Esta mañana, en la reunión del personal, estaba pensando sobre esto y miré al pastor general Mike Goldsworthy. No pude pensar en un apellido más inglés que ese. Me imaginé haciéndome un fanático de este líder y llamándome un Goldworthista (nombre inglés con sufijo castellano). Por otro lado, imaginémosnos a él haciéndose un fanático mío y llamándose un Fernandist o un Fernandian (nombre español con sufijo en inglés).
¡Me maravillo del poder del evangelio del reino que irrumpió para cambiar todos nuestros paradigmas!
Monday, April 20, 2009
RELACIONES PROVIDENCIALES.
(Estos sermones están inspirados en la serie de Andy Stanley: Five Things God Uses to Make Your Faith Grow http://fivethingsgoduses.com/)
Si eres como la mayoría, no puedes hablar de la historia de tu vida sin hacer referencia a la gente que jugó un rol significativo en tu camino. Lo mismo pasa con la historia de tu fe.
¿Cuál es el nombre de la persona que Dios usó para (ojalá no sea el nombre de un familiar) hacer crecer tu fe? ¿Cuál es la persona que te ha animado a crecer en tu fe?
Mi caso: Jorge Carrasco de Juventud Para Cristo. Dios fue el que puso mi vida en intersección con esta persona para transformar mi vida. Cuando yo tenía 17 años me gané una beca para asistir a un campamento de jóvenes, no conocía a nadie, sin embargo él me dio la bienvenida, me presentó al grupo y me cuidó toda la semana para que me sintiera cómodo. Yo le admiré inmediatamente y aprendí mucho de él cómo hacer ministerio con los jóvenes.
Esta serie es acerca de las cosas que Dios usa para que nuestra fe crezca. La semana pasada hablamos de la enseñanza bíblica práctica. Hoy estamos hablando de las amistades providenciales. Seguiremos hablando de las disciplinas privadas, ministerio personal, circunstancias cruciales. Dios usa estas cosas para hacernos crecer en la fe.
Esta es la historia que la gente cuenta: “Y justo conocí a esta persona… mi vecino, me invitó a la iglesia… era un compañero de trabajo y se notaba que era cristiano… “. A veces es un contacto, una conversación, otras veces es sólo mirar cómo viven otras personas.
No podemos contar nuestra historia de fe sin que nos recordemos de esas personas.
Hay un lado negativo también, ¿Puedes nombrar a una persona que llegó a tu vida e hizo que tu fe decayera, o algún incidente y la gente que se involucró te hizo decaer y abandonaste tu fe? Quizás conociste a alguien en la universidad, en el college y uno dice ojalá no hubiera conocido a esa persona, ojalá no haya respondido a ese text message.
Llegaste a esa ciudad con una fe fuerte, pero al conocer a ciertas personas tu fe se debilitó. Tu interés en las cosas espirituales decayó a causa de esas personas.
La verdad es que la relación con la gente influencia e impacta nuestra fe con Dios. Si eso es verdad, entonces es importante analizar a la gente que se involucra en nuestras vidas. “Dime con quien andas y te diré quien eres” o yo podría decir también “dime quién eres y te diré con quien andas”.
Si estás batallando con tu fe y quieres tener una fe grande, tienes que entender que no vas a poder avanzar en tu fe hasta que no consideres con cuál tipo de gente te estás relacionando.
Yo, gracias a Dios, he adquirido una habilidad de conocer a la gente, que hasta me doy cuenta cuando la gente me está diciendo algo y yo sé que no viene de él/ella, sino de alguien más que le ha influenciado.
Dios usa a la gente para construir nuestra fe y usa la historia de otros para ayudarnos a crecer.
¿Qué hace uno con esto? Si tú eres padre te darás cuenta cómo tus hijos se van formando por las relaciones que tienen. Algunos de ustedes se cambiaron de ciudad, de país o sacaron a sus hijos de una escuela para llevárselos a otro ambiente, porque se dieron cuenta de la mala influencia de algunos sobre sus hijos.
Cada día estás forzado a relacionarte con gente que no tiene fe. Si eres una persona de fe, un creyente, entonces será más fácil que tú influyas a otros. Generalmente estamos siendo tentados a hacer lo incorrecto en esta sociedad. Si yo dejo que la sociedad me absorba voy a ser tibio, cínico. En algún momento debemos entender que estamos dejando pasar las oportunidades que Dios nos da para ayudar a otros.
Dios usa las relaciones. Debemos recordar esto y quizás estemos más abiertos para relacionarnos con otros.
Proverbios 13.20 El que con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios se junta, saldrá mal parado.
Salomón combina las ideas: tus amistades le dan forma a tu futuro. Hay una promesa y una advertencia. Si te juntas con un sabio, al final del día serás más sabio. A veces yo le he dicho a la Nona, hoy estuve con fulano de tal y me siento tan bien, me siento renovado, la conversación me animó, la mente se me despejó. Me da gusto hablar con alguien así, aprender de él.
Cada relación que tengo va a lograr una de dos cosas: a) crecer en mi fe, b) decaer en mi fe.
Los muchachos que entran a high school verán que realmente sus compañeros no son malos, no es que estén en contra de la fe y de la iglesia. El problema es que ellos tienen una actitud de “no importa”, “whatever”, tú puedes hacer lo que quieras. No están ni a favor ni en contra de tu fe, es “whatever”. Eso es lo más peligroso para tu fe. Tú dices, “¿por qué me estreso tanto en vivir mi fe, en portarme bien, en ser fiel, y mis amigos viven como si nada importara y no están preocupados de nada?”. Esas son las relaciones más peligrosas para nuestra fe.
1 Corintios 15.33 No se dejen engañar: «Las malas compañías corrompen las buenas costumbres.
Como padres nos preocupamos de que nuestros hijos tengan buenas compañías, pero no nos preocupamos de nosotros mismos, no entendemos que las malas compañías destruyen los matrimonios, los negocios, las iglesias… Hay una relación entre tus relaciones personales y tu fe en Dios, no puedes divorciar estas dos cosas. Porque no importa cuánto ores, cuánto vengas a la iglesia, pero si te relaciones con gente negativa, ellos influirán en tu fe.
Ejemplo: estás enferma, viene un amigo de fuera de la iglesia o alguien de la iglesia a visitarte y te pregunta: ¿nadie ha venido a verte de la iglesia? Tú dices que no, que ella es la primera persona que viene. “¿pero nadie ha venido? ¿El pastor ni siquiera te ha venido a ver?”, replica ella. Debes de inmediato darte cuenta que esa persona es negativa, divisora, mala leche, quiere indisponer a los demás contigo.
Otro ejemplo: has batallado con algún pecado en tu vida, alcohol, drogas, inmoralidad sexual, sin embargo entras a la iglesia con la esperanza que aquí vas a encontrar sanidad y liberación. De repente tus amigos pasados o puede ser también hermanos de la iglesia te invitan a una fiesta, a un evento, a un viaje y allí te ofrecen alcohol, o drogas o eres tentado/a sexualmente.
Aquí señalo dos pasajes bíblicos para entender con qué personas no debemos relacionarnos: 1 Timoteo 5.15. 2 Timoteo 3.1-5 ¡Con esa gente ni te metas!
La iglesia debería ser un lugar de sanidad y santidad. Sin embargo, también es un lugar de seres humanos imperfectos. Aún en la iglesia tienes que rechazar algunas amistades negativas y “reportarlas” para la sanidad del cuerpo de Cristo.
Algunos dicen que pueden tener una confianza grande en Dios y aún así juntarse con la gente que quieran y no les va a afectar. En realidad, la experiencia dice lo contrario. En Ágape enfatizamos mucho que te integres a un grupo para que tengas relaciones providenciales. Cuando la gente toma un riesgo, da un paso adelante y practica esto de las amistades, no desprecia la oportunidad de unirse a un grupo, conversar con alguien. Cuando la gente cuenta su historia siempre agradecerán a sus amigos que lo invitaron.
No hay manera de encontrar un buen marido en el bar. No hay manera de encontrar una buena esposa en un club. Ahí se encontrará gente para pasarlo bien nada más. Yo no me puedo imaginar a un hombre que su pasión es jugar billar todos los fines de semana con una cerveza en una mano y un cigarro en la otra, siendo un buen padre y esposo. No me puedo imaginar a una muchacha muy maquillada, con escote mostrando la mitad de su pecho y pantalones súper apretados siendo una buena madre y fiel esposa, una mujer así es para pasarlo bien, no para formar un hogar. Es mi opinión.
Muchas de las parejas que he aconsejado y tienen graves problemas les he preguntado, ¿en dónde conociste a tu esposo? Y la mayoría que tiene problemas me dicen que en el club, en el bar, en el antro, en la fiesta.
Yo creo que las mejores amistades, los mejores esposos y esposas, los mejores novios y novias se consiguen en la iglesia. Las mejores amistades están aquí.
Tenemos que buscar las amistades ordenadas por Dios, providenciales, edificantes. Por eso es que insistimos tanto que traigan a sus hijos a la iglesia, porque ellos están buscando amistades, insistimos que los manden a su grupo levadura, que ustedes mismos se involucren en grupos pequeños. A veces dicen, es que mis hijos se aburren cuando voy a una actividad. No se preocupe, esas es una enfermedad que se les cura luego, en cuánto conocen a alguien de su edad no tienen más que relacionarse. Si no los animan a asistir, si no les dan dinero para las actividades de la iglesia, van a encontrar otro tipo de amistades que no serán positivas.
Cuando pasen los años reconocerán que esos buenos amigos fueron relaciones fueron determinadas por Dios.
Si para el grado 11 de la escuela no logramos incorporarlos en algo en la iglesia, va a ser muy difícil hacerlo en el futuro.
El otro lado: no sólo tenemos que estar abiertos a relacionarnos con otros, sino que tenemos que ser nosotros mismos personas que influencien en la vida de otros. Tu corazón se rompe cuando oyes una historia, una conversación en el trabajo, quizás sea esa una relación providencial que necesitas iniciar. ¿Quién es la persona por la cual has estado orando, pero nunca le hablas? Tienes que hacer algo para acercarte. Comenzando con lo líderes de la iglesia. Ser líder o servidor en la iglesia no significa nada más estar en una posición de honor. No, significa que tienes que fomentar relaciones providenciales, preocuparte de la gente, llamar por teléfono, visitar a los enfermos y a los necesitados.
La relación con la gente impacta la fe en Dios.
“Estoy tan contento que me invitaste a un café, que entraste a mi oficina, que me escribiste una tarjeta, que me invitaste a tu casa”. Tus amigos decidirán la dirección de tu vida espiritual y tú también decidirás la dirección de muchos al tener amistades providenciales.
Algunos tienen que ser más intencionales. Volver a un grupo, comenzar algo, tienen que involucrarse.
Algunos tienen que cruzar la línea para estar disponibles. Orar diciéndole a Dios que están disponibles.
Todos estamos tan agradecidos con los que nos influenciaron con una carta, con una llamada, mostrando interés. Dios quiere usarte a ti para ayudar a crecer la fe de alguien más.
Escribe el nombre de tres personas con las cuales te esforzarás durante un mes para profundizar la amistad y ayudarles a conocer a Cristo.
Monday, April 06, 2009
San Francisco y el hermano canario.
El domingo en la tarde, después de un largo día ministrando en dos iglesias, llegamos a la casa como a las 5pm. Cansado me siento en el sillón a relajarme. Nona se entretiene con sus canarios. Ella ha tratado por como 20 años de criar canarios. Desde que vivíamos en Chile hemos tenido canarios. Unos se los han comido los gatos, uno se lo comió un pájaro malo en el balcón del departamento, otros se han muerto enfermos, en fin. Finalmente su sobrina Sisy le regaló un macho de Mexicali, de esos "meros machos mexicanos". La pajarita comenzó a poner huevos, pero desgraciadamente eran huevos infértiles.
Tuesday, March 31, 2009
Dagoberto Dupuy Leiva 1933-1979
Hoy, 31 de marzo de 2009 se cumplen 30 años de la partida de mi tío Dagoberto Dupuy. Yo tenía 19 años entonces. Después de tres décadas, nunca más he sentido el dolor tan grande que sentí con su partida. Él fue el primer hombre que marcó mi rumbo espiritual. Al pasar los años no me canso de admirar la visión que tenía, la inteligencia tan despierta y un tremendo sentido del humor. No era un hombre perfecto, tenía enemigos, a veces era impaciente y enojón, era exigente, sobre todo en el vestir y en la higiene. Pienso yo que guardaba algunos resentimientos ya que las luchas internas en la iglesia eran bravas. Pero al final, el saldo para él es favorable. Murió a los 45 años, yo ya lo he superado en 4. Eso me hace humilde, cuando pienso que murió cuando su hijo mayor tenía 22 años y el más chico 8. No vio a ninguno de sus cuatro hijos graduarse de la universidad, ni casarse, ni conoció nietos. Sin duda, hoy sería un abuelo feliz a los 76 años. Él planeaba jubilarse a los 60 años del ministerio. La iglesia de Rosas, fundada por su padres y que él pastoreaba en el centro de Santiago, seguramente sería una iglesia hermosa, influyente, madura. Su muerte precipitó muchas cosas, entre ellas la división de la congregación y mi partida a los Estados Unidos. Nunca más volví a la iglesia de mi niñez. Sin embargo, si mi tío no hubiera muerto, yo no habría seguido el camino de la vida hasta donde estoy y por lo cual alabo infinitamente al Señor por las amistades providenciales y las circunstancias cruciales en mi vida aquí en los Estados Unidos.
Es primera vez que lo voy a hacer: les transcribo lo que escribí acerca de su muerte en mi diario de vida hace 30 años. Perdonen el estilo, las faltas, los pensamientos. Léanme pensando que era un adolescente. Quizás pueden, al final, aplicar el dicho: “los niños y los borrachos siempre dicen la verdad”.
Santiago de Chile, 16 de abril de 1979.
Si el lápiz que empuña mi mano pudiera decir lo que mi ser siente, de seguro que escribiría con letras de sangre mis pensamientos. Aquellos se tornan inciertos, las ideas se confunden porque un puñal de dolor desgarra mi corazón y lo deja sangrando amargura.
Tenía un tío que era mi pastor, y más que pastor era un hermano, un amigo. Me amó mucho, le amé demasiado. Me enseñó mucho, aprendí de él. Hoy ya no está con nosotros, sentimos su ausencia, su tremenda ausencia.
Cuando el grupo de jóvenes volvió de la gira misionera al sur de Chile, él nos fue a esperar a una pequeña iglesia llamada El Rulo. En ese culto predicó un mensaje impactante acerca de una novela histórica llamada Maitenrehue de Sepúlveda Rondinelli. Relacionó esa novela con nuestro viaje al sur y la conquista de almas. En la novela un muchacho ayudaba a colonizar las tierras sureñas de Chile. El domingo siguiente nos recibió en la iglesia de Rosas. Ese día fue el punto cúlmine de su gozo con el grupo de jóvenes, gozo que había comenzado un día de julio de 1978 cuando volvimos de un campamento de invierno del balneario de Cartagena totalmente renovados en el espíritu. Mi tío puso toda su atención en el grupo juvenil y en él depositó su alegría, su esperanza y su amor.
Estaba enfermo de la vesícula, estuvo postrado un mes en el hospital y la muerte lo arrancó violentamente de nuestras vidas.
Hoy retumban en mi mente las palabras que decía el viernes 2 de marzo en la penumbra de su dormitorio. Varios jóvenes fuimos a verlo a su casa. Con una mano sobaba su adolorido estómago y con la otra acariciaba a Nixy que lloraba a su lado. “Niña, no llores” –le decía- “porque si es la voluntad de Dios él me va a sanar, pero si no es así, y él viene por mi, yo me voy con él. Desgraciadamente la iglesia no está preparada para quedarse sin pastor, aún hay muchos que no se han arrepentido, no están preparados, no han madurado”.
“Yo he pasado por tres etapas en mi ministerio” –continuó diciendo- “primero fue la prueba material, cuando tuve que vender mis televisores, mis equipos de radio y trabajar tan sólo para tener comida en la casa. Llegué a ser despreciado por mi mejor amigo quien me dijo que yo era un sinvergüenza. Todo esto lo superé, con la ayuda de mi Dios. Luego vino la segunda etapa, la prueba espiritual. Sufrí muchísimo por la iglesia, las noches de insomnio eran largas, los problemas eran muchos, una parte de la iglesia me rechazaba y sentía que la iglesia se iba de mis manos. Me paraba a la entrada de la iglesia a saludar a todos los hermanos, incluso a los que me rechazaban, aún así ellos me eludían. Pensé en dejar el pastorado para salvar mi alma, pero Dios tuvo misericordia y envió un avivamiento a los jóvenes y con su poder derribó todas esas cosas y hermoseó la iglesia sacando mi aflicción espiritual”.
“Ahora, mi tercera etapa es el dolor físico. De un tiempo a esta parte me he empezado a enfermar y a sentir fuertes dolores, pero si es la voluntad de Dios los superaré como he superado las pruebas económicas y las espirituales. Posiblemente el lunes me operen. Nunca en mi vida he visto a un doctor y nunca he entrado como paciente a un hospital, pero vuelvo a repetir: si el Señor viene por mi, tengo una seguridad plena que me voy con él. Pero la iglesia no está preparada, hay muchos pecadores que aún no aceptan al Señor, y si él me concede la oportunidad de volver a la iglesia, mi primer mensaje será para ellos.”
“Perdonen si me he puesto melodramático, pero las circunstancias así lo exigieron. Dios les bendiga, buenas noches”.
Esa fue la última noche en su casa, al otro día se lo llevaron al hospital. Lo operaron de emergencia y luego tuvo otras dos operaciones sin éxito. Dios había consumado su plan. Falleció el 31 de marzo.
Un día pude entrar a visitarlo con mis padres. Él me pidió que me quedara un momento después que se fueron las visitas, y me contó una experiencia maravillosa que le ocurrió en la primera cirugía. Me dijo que salió de su cuerpo e hizo dos viajes “en su espíritu”. Primero fue a Chillán (ciudad al sur de Chile) y luego a Tongoy (balneario al norte de Santiago). Me contó su experiencia con lujo de detalles y me dijo: “Hijo, tenemos que hacer esto y aquello con la revelación que tuve”. Él se fue, la misión es mía. Fui a Chillán a comunicar lo que él me encargó y ahora espero ir a Tongoy.
Mi tío me enseñó y confidenció cosas muy hermosas, algunas para pregonarlas, otras como para guardarlas en lo íntimo de mi corazón. Me mostró a sus amigos y también me advirtió de sus enemigos. Me habló de su pasado y se ilusionó con mi futuro. ¡Qué maravilloso hombre se nos ha ido!
Estoy tratando de aprender la lección: Dios se lleva grandes hombres para que se levanten otros grandes hombres. Hay un lugar vacío que hay que llenarlo con trabajo y santidad, con amor y alegría, con sabiduría e inteligencia. Y si hay alguien que se ofrezca a llenarlo, ese soy yo.
Si tuviera la oportunidad de tenerlo un instante ante mí le diría: Tío querido, ten confianza en mí porque no te voy a desilusionar. Todas las esperanzas que depositaste en mí no serán en vano; tampoco en vano dijiste que yo era tu brazo derecho, ahora lo voy a demostrar. Tampoco dijiste en vano que yo sería un pastor porque lo seré, ni en vano me llamabas “hijo” porque lo soy. Tu sobrino amado te quiere decir muchas cosas, pero el tiempo es breve. Goza plenamente la presencia de Dios, porque aquí abajo lucharé con brío, y tu lugar vacío, ¡yo lo llenaré! Cuando me toque a mi la oportunidad de cruzar el río cristalino y mi espíritu pase velozmente por el valle de sombra de muerte y me una a mis antepasados, allí en el paraíso, te buscaré alrededor del trono de Dios y te veré para decirte, “tío, ¡lo cumplí”.
Monday, March 30, 2009
PRIMERA SEMANA. UNA FE GRANDE
Esta serie de sermones es creación del pastor Andy Stanley. Los materiales originales en inglés los puede encontrar en http://fivethingsgoduses.com/
Imagínate lo diferente que sería tu vida si tú tuvieras absoluta confianza que Dios está contigo. Imagínate cómo responderías a las dificultades, a las tentaciones e incluso a las cosas buenas, si supieras con certeza que Dios está en todas las cosas planeando todo para tu bien. En otras palabras, imagínate cómo sería tener una fe perfecta.
INTRODUCCIÓN.
Imagínate que tuvieras absoluta confianza en tres cosas, no importa si eres cristiano o no:
1) Que existe Dios.
2) Que es un Dios personal y que conoce tu nombre
3) Que además camina contigo todos los días y que ha prometido nunca dejarte ni desampararte.
Imagínate esa clase de fe. Cuando estás enfrentado a tentaciones sales victorioso. Esa clase de fe que te ayuda en todo momento. Sin temores, completa confianza, sin ansiedad sobre los hijos, el matrimonio, las finanzas. Fe increíble, Dios trabajando alrededor tuyo día y noche. A lo mejor conoces gente así. Tu abuelita, tu mamá.
Es difícil conocer a alguien así, pero imagínate que esa es tu experiencia. Es allí donde Dios quiere llevarnos, a vivir una vida plena de confianza en él.
En toda la Biblia encontramos esta trama, este hilo que nos anima a vivir con una fe grande. En el comienzo, con Adán y Eva, el asunto no fue sólo desobediencia, sino falta de la confianza en Dios. No puedo confiar en ti, tú tienes otra agenda, no puedo creer en lo que me has dicho. Ese fue el punto. Desde entonces Dios ha tratado de atraernos otra vez a él para que le confiemos totalmente, le creamos en todo. Oh, ¡si viviéramos con esa confianza y fe cada día!
Dios tomó al pueblo de Israel para que le predicara al todo el mundo de su amor. Primero tuvieron que confiar en Dios, salieron de Egipto maravillados, después Dios les dio los mandamientos para enseñarles cómo vivir.
El mensaje de Cristo no es darnos más mandamientos, sino que su mensaje es que Dios quiere que pongamos nuestra confianza en Dios otra vez. Confiar en Cristo, tener fe en él para salvación.
La falta de fe es la que nos aparta de Dios.
Mientras más confiamos en alguien la relación es mejor, como el matrimonio, las amistades, los padres-hijos, la confianza ayuda mucho a la relación. “Confío en ti, confío en mi esposa, confío en mis hijos”. Es lo mismo con nuestra relación con Dios. Mientras más confiamos en él, mejor es la relación.
Dios está enseñándonos a confiar en él. No es tanto obedecer, sino realmente poner la fe, la confianza en Dios. A lo mejor no estamos tan cerca, pero tenemos que crecer para tener más confianza en Dios.
Esta es la única vez en que Cristo se sorprende por algo que alguien dijo, generalmente la gente se sorprendía de lo que Jesús hacía, pero aquí es Jesús es el que se sorprende con alguien.
Mateo 8.5-10
Al entrar Jesús en Capernaúm, se le acercó un centurión pidiendo ayuda. (Explicar quién era un centurión: los malos de la película, podían obligarte a llevar la carga, eran los soldados del pueblo invasor, paganos, incrédulos. Este centurión le pidió un favor a Jesús…)—Señor, mi siervo está postrado en casa con parálisis, y sufre terriblemente. (Seguramente los discípulos dijeron, ¡qué bien! Que se muera entonces, y ojalá sea contagioso y que tus cien hombres se contagien y tú también y que se lleven la parálisis a Roma y también el emperador se muera) —Iré a sanarlo —respondió Jesús. —Señor, no merezco que entres bajo mi techo. (Jesús pensaría, “tienes razón, no lo mereces, todo mundo aquí te odia). Pero basta con que digas una sola palabra, y mi siervo quedará sano. (Te he visto y creo que lo puedes hacer a la distancia, tienes el poder de hacerlo desde aquí, tenemos algo en común Tú y yo tenemos algo en común, le dice el centurión: tenemos gente bajo nuestra autoridad. Tú le ordenas a las enfermedades y ellas te obedecen.). Porque yo mismo soy un hombre sujeto a órdenes superiores, y además tengo soldados bajo mi autoridad. Le digo a uno: "Ve”, y va, y al otro: "Ven”, y viene. Le digo a mi siervo: "Haz esto”, y lo hace.
Al oír esto, Jesús se asombró y dijo a quienes lo seguían:
—Les aseguro que no he encontrado en Israel a nadie que tenga tanta fe.
Jesús se asombró, es la única vez que Jesús se asombra, y no es por obediencia, sino por la fe de este hombre, la confianza que le tuvo. “No he encontrado a nadie…” incluye a los apóstoles, a los fariseos. El centurión no puede hablar el idioma hebreo, no sabe los 10 mandamientos, adoraba a Zeus, no puede entrar al templo, pero puede expresar una fe más grande que los demás. Jesús dice ¡Guau!
“Tengo absoluta fe en ti, puedes decir la palabra, ni siquiera tienes que venir a mi casa, yo sé que tú lo puedes hacer porque sé que representas a algo grande”.
Lo que más ayuda a la relación es nuestra expresión de confianza. Lo que más nos gusta es la confianza que nos tienen los hijos, no tanto que cumplan los mandatos que les damos.
En mi vida espiritual ha habido estas cinco cosas que me han ayudado a crecer en la fe. Hay 5 categorías que Dios usa para que nuestra fe vaya creciendo. No es una lista que uno hace. No es una lista que está en la Biblia. Podemos estar equivocados, quizás pueden ser 6 ó 7, esto es sólo una observación, no es un “así dice el Señor”.
Llene en su boletín lo que tiene que llenar.
1- Enseñanza práctica. Todos pueden mencionar que en algún momento de su vida hubo alguien los invitó a un estudio bíblico, escucharon una enseñanza, una predicación que les impactó. Algunos se han criado con la Biblia, pero nunca la han leído. Cuando a mi se me enseñó acerca del señorío de Cristo, mi vida cambió.
2- Relaciones providenciales. Conocí a fulano, conocí a un compañero, mi amigo me invitó, mi jefe me habló del Señor, un grupo de hombres, un desayuno. Dios puso a alguien en mi camino. En mi peregrinaje espiritual, el haber conocido a Craig Woolsey cambió totalmente mi visión de la iglesia y del reino de Dios.
3- Disciplinas privadas. Alguien te enseñó a estar a solas con Dios, alguien te dio un libro, alguien te enseñó a escribir un diario de vida espiritual, orar, a ayunar, y comenzaste a practicarlas solo. Antes escuchabas los rezos y memorizabas (ángel de la guardia, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día), pero alguien te dijo que tenías que hablar con Dios con tus propias palabras y tú pensabas que si no decías las palabras correctas Dios te iba a castigar. El dinero tenía control sobre ti y alguien te enseñó a ser generoso, a dar, aunque no lo hacías con alegría.
4- Ministerio personal. Te invitaron a enseñar, a ser voluntario, a ir a misiones, a servir a la gente, a trabajar en EMA, a enseñar a niños. Dios te comenzó a usar. Estabas muy asustado y aprendiste a confiar 100% en Dios para servir a la gente. Luego la gente te escribe una carta y te dice “cambiaste mi vida”.
5- Circunstancias cruciales. Una muerte, un divorcio, una crisis económica, en donde podrías haber ido en una dirección o en otra. Casarse, tener un bebé y sentirse responsable por esta bolita de carne que llora y hace pupú, cambió toda la vida, y teníamos que decidir por un lado o por otro. Quizás dificultad en embarazarse te hizo volver a Dios y crecer en tu fe. Dios trabajó en tu vida de tal manera que tu fe creció. Dios nos cambió y nos hizo crecer con el dinero debido a las circunstancias, la carrera.
Si sólo permitimos que Dios haga estas cosas nuestra fe va a crecer. Uno no lee la Biblia para cumplir, para poner una estrellita, sino para crecer en la fe, para tener intimidad con Dios. Hay gente que solo tiene información, leen la Biblia, pero son arrogantes en su conocimiento, son legalistas, arrogantes. No podemos vivir aislados.
RELACIONAR ESTAS CINCO COSAS CON ELPROPÓSITO DE ÁGAPE: AMAR A DIOS, AMAR A LOS DEMÁS Y SERVIR AL MUNDO. MONSTRARLO EN EL PLANO DE LA CASA DE DIOS.
Dios quiere una relación con nosotros para que crezcamos en nuestra confianza con él. Cuando tú creces en tu fe y creces en tu confianza, entonces dependes más de él, más y más. Levantarse en la mañana y decirle a Dios: Señor, confío en ti. Eso ocurre cuando la fe es más profunda. Dios usará la Biblia, las relaciones, las disciplinas, el servicio, las circunstancias.
Jesús, presentando al centurión: les presento a este pagano que nunca ha leído la ley de Moisés, no sabe nuestro idioma, no puede entrar al templo, pero tiene una fe asombrosa. Quiero que sean como él.
Nos llama a una relación, no necesariamente perfección.